TERAPIA SISTÉMICA FAMILIAR
La Terapia Familiar Sistémica, es una terapia que nos permite ampliar la mirada, observando no solo a la persona sino también al sistema familiar del que proviene, para una mayor comprensión de la causa u origen de lo que la persona trae a consulta.
¿Sabías que conocer los patrones familiares puede ayudarte a comprender mejor tu propia vida? Los patrones familiares son:
- La manera de relacionarse entre los miembros de la familia.
- Los vínculos de amor y lealtad que se establecen.
- Las creencias que se aceptan o se rechazan en la familia.
Estos patrones influyen en nuestro funcionamiento en la vida y en muchas dinámicas que nos resultan difíciles de cambiar o de entender. Por eso, es importante conocer y respetar las 3 leyes del orden familiar:
1. La Pertenencia: Todo miembro tiene derecho a pertenecer a la familia, sin importar sus características o circunstancias.
2. La Jerarquía: Todo miembro tiene un lugar según el orden de llegada. Los padres son los primeros y los mayores, y los hijos siguen por orden de nacimiento. Si alguien ocupa el lugar de otro, se produce un desorden que afecta al equilibrio familiar. Es como si un planeta o una estrella cambiara de posición en la galaxia: sería catastrófico.
3. El equilibrio entre el dar y el tomar: Todo miembro debe dar y recibir en proporción a su lugar y su rol. Si alguien da demasiado y recibe poco o nada, o al revés, se rompe la armonía familiar.
Estas leyes nos ayudan a entender por qué a veces tomamos caminos o decisiones que no nos hacen sentir realizados o felices. Por ejemplo, puede que alguien se haga cargo del negocio familiar por tradición o por lealtad, sin plantearse si es lo que realmente quiere.
¿Te has preguntado alguna vez por qué repites ciertos patrones o sufres sin razón aparente? La respuesta puede estar en tu sistema familiar. Y es que:
- Lo que no se resuelve en una generación queda como una marca en el sistema familiar.
- Las generaciones siguientes heredan de forma inconsciente esa marca y buscan solucionarla.
- Esa búsqueda puede manifestarse en conductas o emociones que no entendemos o que nos perjudican.
Es como si alguien rompiera una carretera por la noche y otras personas intentaran arreglarla por la mañana, sin saber quién lo hizo ni por qué. Así, podemos estar cargando con el dolor de una guerra, la pérdida de un hijo, el hambre o cualquier otra situación que vivieron nuestros antepasados.
Para liberarnos de esas cargas y vivir de forma más plena, es importante comprender nuestro sistema familiar. Esta terapia nos ofrece:
- Una mirada renovada sobre nuestra historia familiar.
- Una comprensión más profunda y completa de nuestro funcionamiento en la vida.
- Una solución favorable para nosotros y para nuestro sistema familiar.
